sábado, 14 de enero de 2023
martes, 10 de enero de 2023
¡Ve y dile a mi Iglesia que muy pronto iré a buscar a los míos! Dios
Paz de Dios a toda la amada iglesia del Señor, quiero contarles algo que paso en este día de ayuno quien les habla es la hermana Isabel Barboza estoy en este trabajito de tres días de ayuno por pedido del Señor; y el Señor al principio de este pedido de trabajo, me dijo que me había marcado estos días de ayuno, porque el quería revelarme algo, un misterio me dijo el Señor ¡Aleluya! ¡Aleluya!
Y el día de ayer, nuestro hermano Martin Cena, cuando termino el culto de la noche, yo seguía en este trabajo de ayuno, y el siervo de Dios le mando un audio a mi esposo, le dijo que en este trabajo de ayuno, Dios me iba a llevar por un momento para mostrarme algo, y le dijo a mi esposo que no se preocupara para cuando llegara ese momento, que no se asustara porque "el Señor me iba a tomar por un momento para mostrarme algo sublime para hablar al pueblo", y le dijo a mi esposo que solamente pusiera la mano en mi cabeza y orara cuando viera ese momento, y así escuchamos lo que el Señor dijo, y yo entre a mi habitación y seguí orando en el trabajo del ayuno...
… en ese momento hermano, hermana, el Señor me dijo: "Te llevaré un momento y te mostrare algo para hablar a mi Iglesia" y paso esa noche, estuve orando y hoy a la mañana cuando seguí orando la primera oración, bien tempranito el trabajo de ayuno ya a las seis, allí hermanos, cuando finalizo el horario de la oración de la noche, cuando presente el nuevo día al Señor, el Señor me dijo:
¡HOY VERAS ALGO GLORIOSO!
¡HOY TE MOSTRARÉ ALGO!
Me dijo el Señor
"Ahora te tomaré por un momento y te mostraré algo, llama a tus hijas, a tu esposo, ¡Avísales que te tomaré por un momento! Para que ellos no se sorprendan, no se asusten"
Pero en ese momento mi cuerpo hermanos, en ese momento mi corazón empezó a latir muy fuerte y en medio de mi pecho, empecé a sentir un dolor muy fuerte, un dolor muy fuerte era hermanos, en el medio del pecho,
y yo le dije Señor ¿porqué me duele tanto el pecho? y me dijo:
"Porque ahora, tomare tu alma, tomare tu espíritu por un momento y el cuerpo siente cuando yo tomo el alma y el espíritu" Me dijo el Señor
Y así logre llamar a una de mis hijas, con la voz como me salió porque estaba ya entrando en ese momento donde el Señor quería tomarme, y vino mi niña y yo solamente le dije llama a Papá, y vinieron rápido a mi habitación, pero yo ya sentía mis manos frías, empecé a sentir mi cuerpo frío y ese dolor muy fuerte en mi pecho, ese dolor muy fuerte, mi corazón empezó a latir muy fuerte y solamente dije a mi esposo, ora, fue lo único que me acuerdo que me salió en ese momento hermanos ya no sentí mi cuerpo, no sentí mis manos, no sentí mis pies, ¡No sentí nada! Hermanos esto es real, lo que yo les cuento, y les tengo que contar porque el Señor me dijo que lo hable a su Iglesia y empecé a subir, mi espíritu empezó a subir
mi esposo me dijo que el oraba por mi y empezó a llamarme por mi nombre pero yo ya no reaccione yo me fui por un momento, y luego subí, subí hermanos en el espíritu con el Señor, sentía que el Señor me hablaba, pero no lo veía sino que sentía que Él me hablaba Él me llevaba y de repente empecé a ver muchas tinieblas, muchas tinieblas hermanos, muchas tinieblas parecía como un humo negro, feo muchas tinieblas, y yo mire así para abajo y era muy profundo esas tinieblas había como un precipicio sin fin, era muy feo
Y de repente levanto mi cabeza y había una puerta muy angosta, y para adentro había solamente un resplandor, el resplandor que había allá dentro iluminaba ese lugar...
… y en la puerta de ese lugar habían dos ángeles parados uno de un lado y otro del otro y estaban firmes parados
y yo dije Señor ¿Qué es estas tinieblas? ¡Que feo que es Señor y ¿Qué es esta puerta? y el me dijo:
¡ESA ES LA NUEVA JERUSALEN!
¡AHORA ENTRA!
Y pase por medio de esos dos ángeles, hermanos, y cuando pase por medio de esos dos ángeles miro hacia adentro y era muy resplandeciente
Y vi una mesa muy larga
Una mesa larga, larga
¡Era muy linda esa mesa!
Esa mesa estaba lista, tenía un mantel muy delicado,
Esa mesa era muy larga, ¡Muy linda!
¡Muy hermosa!
Y yo le dije Señor ¿Qué es esa mesa tan larga?
Y me dijo el Señor:
"YA MI MESA ESTÁ PREPARADA PARA
LAS BODAS DEL CORDERO
MI MESA ESTA PREPARADA"
Y cuando mire así hermanos, andaban alrededor de esa mesa en ese lugar tan grande que había muchos ángeles se paseaban muy alegres muy contentos, muy gozosos, y yo mire esa cantidad de ángeles como que se preparaban, como que caminaban hermanos, algunos agarraban unas trompetas en sus manos y caminaban y caminaban, alrededor de aquel lugar...
...y yo dije: Señor ¡Cuántos ángeles! y me dijo el Señor:
"MIS ÁNGELES ESTÁN GOZOSOS, MIS ÁNGELES ESTÁN ALEGRES,
¡¡¡PORQUE MUY PRONTO IRE A LA TIERRA A BUSCAR A LOS MIOS!!!
¡MUY PRONTO IRE!
¡¡¡MUY PRONTO!!!"
Me decía y repetía, y me decía una y otra vez:
¡¡¡MUY PRONTO IRE A LA TIERRA A BUSCAR A MI PUEBLO!!!
Y de repente mire a otro lado de la mesa, y ahí se acercó un ángel, y ese ángel se sentó con un libro en sus manos, y era un libro grande, y ese ángel tomo ese libro así en su mano y lo empezó a abrir y yo mire y el Señor me dijo:
"ESE ES EL LIBRO DE LA VIDA
Ahora iras y dirás esto a mi Iglesia
Quiero que hables esto a mi Iglesia:
Que muchos están dentro de la iglesia, pero sus nombres aún no están anotados en ese Libro que es el Libro de la VIDA
Muchos están dentro de mi casa, de mi iglesia, muchos están dentro de mi pueblo, concurren a los cultos pero sus nombres no están anotados en el Libro de la VIDA
Ve y dile a mi Iglesia que muy pronto iré a buscar a los míos!
Y me dijo: "Aún hay pastores, hay evangelistas, aún hay ancianos, obreros, aun hay unos encargados de obras, encargados de iglesias, y sus nombres aun no están anotados en el Libro de la VIDA, y me dijo:
VE Y DILE A MI PUEBLO VE Y HABLA A MI IGLESIA,
Para que corran y se apresuren para que sus nombres sean anotados en el LIBRO DE LA VIDA ¡¡¡PORQUE VENGO PRONTO!!!
VENGO decía el Señor VENGO A LA TIERRA PRONTO
PRONTO, PRONTO, diles esta palabra
QUE MUY PRONTO
MUY PRONTO
VENGO POR MI PUEBLO
Ve y dile esta palabra, así a mi Iglesia
Y me dijo el Señor: "Tu viste las tinieblas que te he mostrado, viste esas tinieblas que estaban afuera de la gran Jerusalén"
y en ese momento yo no podía contestar al Señor, porque me quede asombrada cuando me decía esto y me dijo el Señor.
"Aquel que no este anotado en el Libro de la Vida será echado, será lanzado a esas tinieblas que te mostré"
... y aún hay muchos, dice el SEÑOR que no están anotados en el Libro de la VIDA, y las tinieblas de afuera están allí
Me dijo el Señor: "Las Iglesias están llenas, las iglesias están llenas pero muy poquitos son los míos, muy pocos tienen anotado sus nombres en el Libro de la VIDA, ¡Muy pocos!
Y me dijo el Señor: "Ve y habla a mi Iglesia lo que yo te he mostrado, que con apresuramiento, busquen de mi presencia, porque VENGO PRONTO ¡VENGO PRONTO!"
y me mostro eso el Señor y me dijo: "Ahora volverás a tu cuerpo" pero yo ya no quería salir de ese lugar, yo no quería salir de esa gloria donde yo estaba es algo tan lindo hermanos que no se compara con lo que nosotros vivimos era tan lindo, era tan resplandeciente
Era tan linda esa gloria y luego me dijo el Señor: "Ahora vamos entraras en tu cuerpo, porque te tome por un momento para mostrarte esto" y no le conteste ya nada al Señor sino como que me di la media vuelta y empecé a salir, el Señor estaba esa presencia al lado mío, yo no le veía, Él estaba al lado mío y me hablaba, su presencia estaba ahí me guiaba...
…cuando salgo a la puerta de ese lugar tan lindo, miro otra vez, eran muchas tinieblas, eran muchas tinieblas, era muy feo hermanos...
…y luego hermanos me dijo el Señor:
"Ahora entraras a tu cuerpo"
como que inmediatamente descendí y empecé a sentir en mi cuerpo como ese dolor fuerte en el pecho, ese dolor era muy fuerte, mi cuerpo estaba como sin vida, de repente hermanos cuando empecé a sentir ese dolor tan fuerte, el Señor me dijo:
¡Ahora entraras en tu cuerpo y estarás bien porque solo fue un momento que te tome, ahora estarás bien levántate!
Porque yo estaba tirada de rodillas, y en ese momento comencé a escuchar que mi esposo me llamaba fuerte y me decía, Mabel, Mabel, escuche mis niñas lloraban, lloraban