¡PREPÁRATE PARA SUBIR EN EL RAPTO!

El 26 de Junio de este año 2021 estábamos en la iglesia buscando el rostro del Señor, era un día Sábado, me había estado sintiendo débil días atrás y ese día me sentía mas débil aún, me tocaba predicar, sólo pude hacerlo por quince minutos, pero por la falta de fuerzas, tuve que poner a la iglesia en oración, sentía una debilidad muy fuerte eran las doce del mediodía, cuando escucho la voz del Espíritu Santo que me dijo: “Hace tiempo te hable que estando tú en México, Yo te hablaría, HOY ES EL DÍA, HOY VOY A ENTREGAR UN MENSAJE PARA TODO MI PUEBLO, ha llegado el día, no tengas temor, no tengas miedo, porque hoy hablaré a tu vida”

… en ese momento fui a mi cuarto, guiado por el Señor tres hermanas ungieron mi cuerpo, mi vida, yo estaba poniéndome en las manos del Señor, Sentía que mis huesos se hacían pedazos, empecé a tener un dolor en la boca de mi estomago, ya no tenía fuerzas, oigo la voz del Señor diciéndome:“ No temas , no tengas miedo porque yo Jehová estoy contigo”.
Empecé a ver una visión y en esa visión yo miraba un río de aguas azules,
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ese río era de aguas cristalinas,
tenía piedras de muchos colores
cuando veía esa visión, me sentía ya con fuerzas, estaba en el espíritu como dijo Juan “en el día del Señor” y el día del Señor para Juan era el Sábado, y ese día sábado el Señor estaba hablando a mi vida, y veía un río de aguas azules, cristalinas, y a la orilla de aquel río miraba un personaje y él empezó a decir: “Al que el Hijo libertare será verdaderamente libre” me lo volvió a repetir ¡¡Al que el Hijo libertare
será verdaderamente libre!!

y lo dijo por tercera vez y cada vez lo decía más fuerte y decía: ¡¡¡Al que el HIJO libertare será verdaderamente libre!!! Y cuando yo lo mire me dijo:
“YO SOY el HIJO DEL HOMBRE, que ha ido a la tierra a hacer libre a aquel que está cautivo”
empezaba a mirar esa visión y mientras yo miraba esa visión, yo miraba a otras personas que estaban cautivas,
enfermas,
y el Señor me decía:
“Al que el HIJO libertare será verdaderamente libre”  empecé a ver como las personas eran libres en el nombre de Jesús,
“porque yo he ido a la tierra a hacer libre a aquel que está cautivo, dile a mi pueblo que se sumerja en este río, porque cuando mi pueblo se sumerja en este río,
¡Las cargas serán quitada de ellos!
Cuando mi pueblo se sumerja en este río,
¡Las ataduras se cortarán!
¡Las cadenas se soltarán!
Dile a mi pueblo, que todos tienen acceso a este río, porque este es EL RÍO DE MI ESPÍRITU,
donde mi pueblo puede encontrar
descanso para su alma”
Hermanos, yo miraba un segundo río, pero aquel río era como un aceite cristalino

y el Señor me decía: “Dile a mi pueblo que se sumerja en este río, porque este río de aceite cristalino es el río de mi unción del Espíritu Santo

Dile a mi pueblo que ¡ENTRE A ESTE RÍO!
¡QUE SE LLENE CON EL FUEGO
DE MI ESPÍRITU SANTO!

Que no solamente se quede a las orillas, sino que entre hasta adentro de una vez en el río de mi Espíritu...
… y puedan navegar en el río  ¡¡¡DE LA UNCIÓN DE MI ESPÍRITU SANTO!!!
“Porque mi pueblo falta que se sumerja en este río, donde el ACEITE ES CRISTALINO”

“En este río donde el aceite quema, en este río donde es de la UNCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO,
y me volvió a decir: “Porque al que el Hijo libertaré será verdaderamente libre”
“Será verdaderamente LIBRE”
¡Y encontrará PAZ para su alma!
El Señor me decía: "Tengo que mostrarte muchas cosas porque es necesario", empezaba a mirar en esa visión “un salón grande”
y entrábamos por una puerta que estaba abierta, el techo del salón era de piedras preciosas, todo el techo estaba cubierto con piedras y brillaban, perlas y esmeraldas …

…y yo podía mirar que allí estaba un banquete listo, una mesa preparada, ya las copas estaban servidas, ya las mesas estaban servidas con mana del cielo,

pero lo que me asombraba era que no era como la primera vez (), sino que había una plataforma con unos instrumentos, y esos instrumentos ya tenían alguien que los estaba tocando, eran ángeles que estaban cantando coros de júbilo, eran ángeles que estaban alabando con coros de júbilo,
Y el Señor me hablaba en esa visión y me decía:* “Ya los ángeles están cantando coros celestiales, ya los ángeles están alabando, porque están esperando a la Novia,  este es el Salón donde se celebrará "Las Bodas del Cordero"
¡Con la Novia sin mancha y sin arruga!
Pero en aquel día llamaré a muchos por sus nombres, y muchos no responderán, llamaré a mi pueblo por su nombre y muchos no responderán, porque muchos no entrarán a este lugar por esa puerta que tu entraste,

¡Dile a mi pueblo que en AQUEL DÍA QUIERO ESCUCHAR SU VOZ! ¡DILE A MI PUEBLO QUE EN AQUEL DÍA QUIERO ESCUCHAR QUE ESTÉN AQUÍ!
Me acuerdo que yo empecé a mirar una puerta frente de mi y del Señor, y miraba que esa puerta se empezó a abrirse, vi que el Señor Jesucristo empezó a hacer reverencia y empecé a mirar que iba entrando un León gigante, un león sublime y aquel León venía cubierto con una coraza de fuego,
…y el Señor Jesús me dijo: “El león que miras frente a nosotros, es el "León de la tribu de Judá", es el Padre que ha salido de su trono para vencer y para dar victoria, ese León es "EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ"
¡QUE HA SALIDO PARA VENCER!”
Yo podía mirar unas letras que se ponían frente a nosotros y el Señor me decía: “Deletrea letra por letra, porque en ese día mi pueblo verá estas letras en este lugar” y podía deletrear H-A-S-H-E-M y me volvía a decir: “Vuelve a deletrear estas letras”

H-A-S-H-E-M

y me decía “Esto verá mi pueblo en aquel día de las BODAS DEL CORDERO”

Y yo le decía Señor cuanto falta, el me respondía No falta mucho tiempo, donde mi pueblo ya estará en este lugar, dándome la gloria, la honra y toda la alabanza, y el me decía deletrea letra por letra ¡¡¡HASHEM!!! y por segunda y tercera vez me hizo deletrear.

Cuando yo regresé busqué el significado, y salían unas letras hebreas que significa:

¡¡¡YO SOY EL QUE SOY!!!

Fue lo que Jehová le hablo a Moisés, Yo soy HASHEM YO SOY EL QUE SOY, y dirás a aquel pueblo que YO SOY el que te ha enviado, porque Dios no quería dar su nombre para que el pueblo no tomara su nombre en vano, el Señor dijo YO SOY HASHEM, YO SOY EL QUE SOY, y en esta hora el Señor nos dice YO SOY EL QUE SOY, "YO SOY EL GRANDE EL PODEROSO" "YO SOY EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA"

Ya no miraba al Señor, sino que miraba un león frente de mí grande, y ese león me acuerdo que me dijo: “No temas, porque yo soy el León de la Tribu de Judá que ha dejado su trono para vencer, te voy a enseñar quién es el León de la Tribu de Judá, para que le digas a mi pueblo QUE YO SOY UN DIOS PODEROSO

QUE YO SOY UN DIOS GRANDE

FUERTE Y SUBLIME

Y QUE NO HAY OTRO COMPARADO A MÍ

Para que le digas a mi pueblo "QUIÉN HA SALIDO PARA VENCER Y VENCERÁ”

Salimos de ese lugar, y mientras salíamos llegamos a una plataforma oscura, y el Señor me decía: “Aquí hay millares y millares de demonios”, alrededor de aquellos demonios los cubría una nube gris y Él me decía: “Estas son las "huestes de maldad", pero te voy a enseñar ese León de la Tribu de Judá, me acuerdo que yo escuche que Él rugía, y cuando Él rugía yo pude ver que esas huestes se hacían pedazos, se fulminaban, se hacían polvo, y EL me decía: “Porque YO EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA HE SALIDO PARA VENCER Y PARA DAR VICTORIA ¡YO HE SALIDO PARA VENCER!” ¡¡¡ALELUYA!!!

Bajábamos a la tierra y cuando bajábamos a la tierra pude ver millares de millares de demonios y Él me decía: “Mira aquí en la tierra, hay millares y millares de demonios, pero solo los que tienen visión espiritual los podrán ver, los que tienen visión carnal no los verán, Dile a mi pueblo que tenga su visión espiritual abierta para que se den cuenta con los demonios que se están enfrentando día con día, estos demonios que están en la tierra operan en los corazones, entran en los pensamientos, operan en los hogares para destruirlos, entran en las iglesias para destruirlas, entran a los corazones para perturbarlos, y entran a los pensamientos para turbarlos,

pero dile a mi pueblo quién es el LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA, porque yo he salido para pelear por un pueblo pequeño que está en la tierra”

Me acuerdo que ÉL empezó a rugir, y mientras ÉL rugía yo empecé a ver que esos millares y millares de demonios que rodeaban la tierra de lado a lado se paralizaban, y ÉL empezaba a decirme: “Estos demonios se han paralizado porque delante de mí nadie puede estar en pie todo demonio y principado se sujeta en mi nombre, se sujetan con el poder de mi autoridad, dile a mi pueblo que reprenda a los demonios, dile a mi pueblo que eche fuera los demonios que paralice a los demonios en mi nombre, porque ellos no tienen parte ni suerte, porque ya están vencidos ”

Empecé a mirar un altar, como de tres metros de largo, y en ese altar pude ver veladoras prendidas, empecé a ver como era un altar de muerte, el Señor me dijo: “Este altar se ha levantado para no ver esta obra aquí de México levantada, yo te enseñaré quién es el León de la Tribu de Judá que ha salido para vencer, y él empezó a decir: “YO SOY EL ALFA Y LA OMEGA” y cuando Él dijo “YO SOY EL ALFA Y LA OMEGA”, ese altar se hizo pedazos, ese altar se hizo pedazos y el Señor me decía: “Para que le digas a mi pueblo quién es

EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ

¡¡¡ES REAL !!! ¡¡¡Y QUE ÉL EXISTE!!!

¡QUE ÉL ES REAL! ”

¡Alabado sea el ESPÍRITU SANTO!

¡MI ALMA LO ALABA! ¡Glorias a JESÚS!

De pronto amados hermanos subíamos al segundo cielo y ahí podía ver un altar de piedra que flotaba en el aire, y en ese altar de piedra estaba satanás sentado, que Jehová lo reprenda, tenía una lanza en su mano, la punta de aquella lanza era filosa del lado izquierdo tenía un león también gigante, y el Jehová me decía: “Mira, satanás también anda como un león buscando a quién devorar, a quien destruir, buscando una puerta abierta para devorar, satanás también anda como un león rugiente, buscando a quién destruir, pero YO HOY LES ENSEÑARÉ QUIÉN ES EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA” Satanás se ponía en pie, y le daba una orden a aquel León que estaba del lado izquierdo que atacará al LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ, y cuando ese león se lanzó furiosamente e iba en el aire velozmente hacia el LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA, Yo empecé a escuchar al Señor que decía: “YO SOY EL ALFA Y LA OMEGA,

EL PRIMERO Y EL ÚLTIMO,

EL QUE ESTUVO MUERTO PERO AHORA VIVO,

¡POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS, VIVO Y REINO”

Y ese león se fulminó, ese león se hizo pedazos, se hizo nada, y el Señor me dijo: “¡Dile a mi pueblo, que satanás ya está vencido! ¡Dile a mi pueblo que satanás ya está vencido!”

Pude ver que cayeron unas cadenas de fuego sobre satanás, se hizo un abismo y lo tragaba, y caía en ese abismo encadenado y su trono se hacía pedazos...

…y el Señor me decía: “Dile al pueblo que no solamente mande al hombre fuerte a las tinieblas, que lo mande al abismo y que ahí lo tenga preso bajo mi nombre, bajo mi nombre tenga preso al hombre fuerte, porque diles que el LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA LO VENCIÓ HACE DOS MIL AÑOS EN UNA CRUZ y dile que EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ AÚN LO TIENE VENCIDO, y dile a mi pueblo que no tenga temor porque él está derrotado, está vencido, porque él está atado en los abismos”

¡Alábalo que ÉL VIVE!

Amados hermanos ÉL me dijo: “Es necesario que conozcas quién es el León de la tribu de Judá, porque no solamente ha salido de su trono para vencer, sino para enseñar a vencer”

Llegamos a un abismo, era como una caverna donde habían tronos de piedra, en cada trono habían demonios gigantes, el Señor me decía: “Estos son los gigantes que han salido en estos últimos tiempos, estos demonios son de dos metros y cincuentaisiete, son gigantes e hijos de satanás”, y cuando el Señor me dijo: “Te he enseñado quien ha salido para VENCER, pero ahora te enseñaré COMO VENCER y no temas porque YO ESTOY CONTIGO” yo lo miraba y era un León gigante como la medida de este techo, y lo miraba y estaba gigante, y yo estaba pequeño a su lado, y Él me decía: “¡Tienes que ir, tienes que pelear! ¡Ahora te toca a ti ir y pelear para que aprendas a pelear!” y yo le decía No voy a poder, y se levantaba un gigante, el gigante del primer trono, y yo le decía no podré, me sentía inseguro y ÉL me decía: “¡VÉ, Y HAZLO EN MI NOMBRE Y NO TENGAS TEMOR PORQUE YO EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ ESTOY A TU LADO!” y yo recuerdo que miraba una espada en mi mano, y aquella espada donde se pone la mano tenía cuatro piedras de diferentes colores, y tenía unas letras postradas y recuerdo que esas letras era YAHWEH y forma la palabra YAHWEH y ÉL me decía: “¡Esta es mi espada!” “¡Toma mi espada y hazlo en mi nombre!” ¡Haz en pedazos estos demonios! Él me decía: ¡Tienes que aprender a pelear!

Y recuerdo que uno de los demonios, se paraba frente a mí, la punta de la espada que yo llevaba era como de hierro y cuando yo tome la espada tan ligeramente, veía un demonio con una plaqueta con su nombre en el pecho y Él me decía: “Deletrea letra por letra” empezaba a deletrear: "a-c-r-o-m" y Él me decía: “¡Córtalo en pedazos!” y yo recuerdo que tomaba la espada y lo cortaba de la cintura hacia abajo, y caía en dos pedazos, aquel gigante, y yo regresaba a donde estaba el Señor y le decía ya lo he hecho, y él me decía: “No solamente quiero que lo hagas en dos pedazos, porque mi pueblo se ha acostumbrado a hacer el pecado en dos pedazos, porque mi pueblo se ha acostumbrado a hacer a los demonios en dos pedazos pero ellos vuelven a tomar forma, se vuelven a restaurar y se vuelven a levantar, tienes que hacer aquel gigante en muchos pedazos” ¡Hazlo en muchos pedazos! ¡Córtalo en muchos pedazos! Dile a mi pueblo que lo haga en muchos pedazos, para que no se restaure, para que no se vuelvan a formar"

Se paraba un segundo demonio, gigante, me acuerdo que él blasfemaba y el Señor me decía: ¡Tienes que cortarlo en pedazos! Yo le cortaba el brazo, y Él me decía: “Tienes que cortarlo en pedazos, en muchos pedazos” Yo lo empezaba a hacer en pedazos, pero ahí veía que se levantaba un tercer demonio, que tenía un nombre y decía "Tamuz", que Jehová lo reprenda, y el Señor me decía: “A él córtale la cabeza, clávale esta lanza en el corazón, y después hazlo en pedazos, ¡Hazlo en pedazos!” y yo lo hacía en pedazos hermanos, pero había un tercer demonio, con el nombre de Astor y también el Señor me decía: ¡Hazlo en pedazos!

Y Dios me mostraba ese nombre en aquel gigante, "Astor" el Señor me decía: “Dile a mi pueblo que tiene que VENCER, dile a mi pueblo que les estoy enseñando quién es el LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ, pero también les estoy enseñando a tomar la espada y a vencer, a cortar a los demonios en muchos pedazos, porque dile a mi pueblo que he aquí les doy poder y autoridad para hollar serpientes y escorpiones y sobre toda fuerza del diablo, ¡Y NADA LES HARÁ DAÑO! ¡Y NADA LES HARÁ DAÑO!”

¡Alabado sea JEHOVÁ!

Después que el Señor me mostrara todo eso, estábamos en el aire y se formaba una nube color verde, circular que nos cubría, estábamos en medio, de pronto el León de la tribu de Judá, se fue corriendo dio un rugido y de su voz salía una voz que decía: “¡YO LES AMO!”

y ÉL corrió y ya no lo vi más, me encontré ahí arrodillado, llorando, y cuando yo estaba arrodillado llorando, pude escuchar un ruido, como si viniera algo muy fuerte, con velocidad a donde yo estaba, y yo estaba ahí postrado, y cuando yo veo, venía unas ruedas de fuego y veía un ángel que cabalgaba aquel carruaje de fuego y llegaba a donde yo estaba ahí, y aquel ángel que venía me dijo: ¿Por qué lloras? : ¿Por qué lloras? Ven, Porque lloras si el LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA SALIÓ DE SU TRONO PARA VENCER, porque lloras SI JEHOVÁ ESTÁ CON VOSOTROS, PORQUE LLORAS SI JEHOVÁ A SALIDO DE SU TRONO PARA ESTAR CON VOSOTROS Y JEHOVÁ NO SE HA IDO, JEHOVÁ ESTÁ CON VOSOTROS, ¿POR QUÉ LLORAS? me decía, JEHOVÁ ESTÁ CON NOSOTROS EN ESTA HORA COMO PODEROSO GIGANTE

Y él me decía: NO LLORES PORQUE JEHOVÁ ES VARON DE GUERRA, PORQUE JEHOVÁ ES LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ Y "PRINCIPE DE PAZ ES SU NOMBRE"

¡OH MI ALMA LO ALABA! ¡SANTO ES EL SEÑOR! ¡ALELUYA!

Él me decía: ¡No llores más levántate! ¡Que Jehová te ha entregado una espada y diles que tomen el escudo que Jehová a enviado! Arriba de aquel carruaje venían muchos escudos de bronce, y él me decía: “Dile al pueblo, que tome estos escudos, porque JEHOVÁ, el VARÓN DE GUERRA SE LOS HA ENVIADO

¡PORQUE CON ESTOS ESCUDOS APAGARAN LOS DARDOS DE FUEGO DEL MALIGNO!

¡Dile al pueblo que tome estos escudos!”

¡Diles a los guerreros de JEHOVÁ que se levanten a pelear! ¡Diles a los guerreros de JEHOVÁ QUE SE LEVANTEN!

¡PORQUE EL VARÓN DE GUERRA ESTÁ CON VOSOTROS!

Me decía: “¡VEN! ACERCATE” y yo temblaba y cuando entraba a aquel carruaje me decía: “No sabes quién soy, yo soy el príncipe del ejercito de JEHOVÁ, yo soy Miguel”, y me acuerdo que el venía cubierto y su piel era de bronce que resplandecía...

… y él me decía: “Este carruaje es del Ejercito de Jehová” ¡Este carruaje es del Ejercito de DIOS! ¡Este carruaje son carros de guerra que utilizamos para ir a la BATALLA,

... porque he aquí vallados de ángeles han salido a la guerra, han salido a la batalla!

Y me acuerdo que yo me subía y él me decía: “No llores más, porque el VARÓN DE GUERRA ESTÁ CON VOSOTROS” y él me dijo: “Daremos siete vueltas por toda la tierra, en cuestiones de segundos, miraras la tierra como esta en la actualidad, y miraras en la actualidad cómo se encuentra el mundo”

Empezamos a dar la primera vuelta y yo miraba como llevaban a enterrar a las vidas a las personas, y el ángel me decía: “Mira, cuántas almas mueren sin JESÚS en su corazón, cuántos mueren sin tener la salvación en su vida, cuánta humanidad se pierde, mira como desperdicia el mundo el tiempo, que cosas vanas, mira como desperdicia aún el pueblo de Jehová en cosas vanas "

Cuando llevábamos la cuarta vuelta, me decía: Mira, cómo en este país oprimido, este país, lleva tiempo oprimido, por aquel presidente impío, y cuando él me lo decía, "Mira cómo van los padres, a buscar comida para sus hijos" iban a los basureros a buscar desperdicios, iban los niños de siete años a buscar comida, para su familia en los basureros,

y él me decía: “Mira esto es en la actualidad, este país está oprimido pero aún muchos del pueblo de Dios también, van a buscar comida en los basureros, los padres lloran y piden auxilio, está nación pide auxilio porque está cautiva, pero hay un pueblo pequeño en esta nación que ha buscado a Jehová, que ha pedido misericordia a Jehová,

diles a esta nación de Venezuela, que JEHOVÁ HA ESCUCHADO SU CLAMOR, y así ha dicho JEHOVÁ:

¡QUE SU ORACIÓN HA LLEGADO YA A SU TRONO

Y QUE YA ESTÁ LLEGANDO EL DÍA

EN QUE ESE HOMBRE QUE LOS TIENE OPRIMIDOS SERÁ FULMINADO, SERÁ HECHO PEDAZOS!

¡TU VERAS POR LOS MEDIOS DE INTERNET!

Por los medios de la televisión que este hombre fue fulminado, se hizo pedazos, y tus ojos lo mirarán y dirán que verdaderamente QUE JEHOVÁ HA HABLADO, porque JEHOVÁ a escuchado la oración de está nación”

De pronto me daba la última vuelta y a la última vuelta, me dijo: “Mira, el futuro del mundo” empecé a mirar una enfermedad desatarse, donde al humano se le carcomía la piel y se le podía ver el cerebro, se le carcomía la piel en la boca y se le podía ver la mandíbula, se le carcomía la piel en la planta de su cuerpo y se le podía mirar el hueso salirse, y aquel ángel me decía: “Habla, habla a la iglesia que esto es para los impíos, habla a la iglesia que esto es para los blasfemos, para los que blasfeman contra la palabra de Dios, habla y diles que esto es para los que han blasfemado contra la palabra santa de Dios, que esto es para los hechiceros, brujos, esto es lo que les pasará a los que practican tales cosas, esta enfermedad, está a punto de desatarse, y el mundo entrará en terror”

y él me decía: “Tienes que contar esto, porque todo está cerca, porque todo está cerca, tienes que decirle al pueblo sobre todo lo que EL LEÓN DE LA TRIBU DE JUDA TE HA ENSEÑADO” y eso es lo que el Señor me mostraba, amados hermanos Dios nos ha dado armaduras, poderosas, LA ORACIÓN, EL AYUNO, LA PALABRA DE DIOS, PARA PODER VENCER AL ENEMIGO, CON LA PALABRA DE JEHOVÁ, nos ha dado ese poder y esa autoridad y en el nombre de JESÚS, lo vamos a VENCER, porque ¡ÉL es GRANDE!

¡¡¡PODEROSO!!!

¡ALELUYA! ¡MI ALMA ALABA AL SEÑOR! ¡ALELUYA!