¡He aquí yo vengo pronto!
"Soñé que estaba en un cerro, muy alto, y estaban todos los árboles, casas abajo, muchas casas, y yo estaba en ese cerro con mis niñas jugando,
y yo miro a mi izquierda y había como una ciudad cuadrada, todo verde, lo que más se veía era verde, un verde vivo color hermoso, y era una ciudad resplandeciente algo inexplicable,
lo que más me llamó la atención de esa ciudad fueron ángeles que eran como luces resplandecientes que giraban y se movían de un lado al otro en esa ciudad… y yo le digo a la persona que estaba a mi lado ¡Cristo vino!
¡Cristo vino!
Y en ese cerro donde estaba, era como que el cielo estaba más cerca, y miro frente mío, ¡Había un trono! algo que no puedo explicar, pero voy a tratar de decirles cómo era el trono,
vi a alguien en ese trono ¡Resplandecía! no se le podía mirar, alrededor del trono seres girando, ángeles, resplandecientes girando alrededor del trono, cuando yo veo eso comienzo a gritar que ¡Cristo vino!
¡Cristo vino!
Cuando yo vuelvo a mirar aquella ciudad en el cielo, se hizo una lucecita y se fue al cielo, toda la ciudad en una bolita y se fue al cielo, y se desapareció, la gloria del Señor ya no estaba
y empecé a gritar desesperada ¡No vino Cristo! automáticamente me despierto en un culto, ¡llena la iglesia!, de punta a punta, llena, yo estaba sentada con mi himnario cantando, ( para los que me conocen saben que canto a los gritos) con mis ojos cerrados yo estaba con mi himnario cantando y hermanos comencé a volar, y empecé a gritar ¡Ahora sí es la venida de Cristo!
Empezamos a volar, y cuando yo miro para abajo, estaba toda la iglesia en el mismo lugar,
y seguían unos hermanos mirando de un lado para el otro, unos cantando, cuatro o cinco personas volaron conmigo,
yo me desperté hermanos en una tremenda aflicción, pude ver que la iglesia entera se quedaba, y nadie vio cuando nosotros comenzamos a volar, nadie se dio cuenta y nosotros, podíamos ver que casi todos se quedaban habían mas o menos unas doscientas personas en esa iglesia, cuatro o cinco volábamos,
¡Las Bodas del Cordero!
Hermanos, hermanas, no tengan por tardanza la venida de Cristo porque está más cerca de lo que ustedes se pueden imaginar,
Por favor ¡Preparémonos, porque esto es real!
¡Cristo viene a buscar a su Iglesia!
Tomemos consciencia, ¡Agárrate con Dios! ¡Agárrate con él! ora con la cabeza en el suelo, pidiendo misericordia a Dios, en llanto pedirle que vuelva a buscar a su iglesia, él está escuchando el clamor de su pueblo iglesia, y ¡La Gloria de Dios es tremenda!
Les dejo un versículo Apocalipsis capítulo 22, versículo 12
y les dejo esta palabra:¡No tengan por tardanza la venida de Cristo!
¡¡¡He aquí, yo vengo pronto!!!
¡Dios te
bendiga!
(Testimonio del sueño de la venida del Señor por su Iglesia a una hija de Dios en el anonimato)
